“quisiera saber algo acerca de la danza”.
Pues, hermano, no sé lo que Ud. quiere saber sobre la danza. Hay varias veces en las Escrituras que la gente bailó, y unas veces bailaron para glorificar al Señor. Por ejemplo, leemos en Éxodo 15:20-21, “20 Y María la profetisa, hermana de Aarón, tomó un pandero en su mano, y todas las mujeres salieron en pos de ella con panderos y danzas. 21 Y María les respondía: Cantad a Jehová, porque en extremo se ha engrandecido; Ha echado en el mar al caballo y al jinete.” (Véase también 2 Samuel 6:14). Y, a veces bailaron en una manera pecaminosa, como leemos en Éxodo 32:19 (véase también Mateo 14:6).
Pero, hermano, supongo que esté preguntando sobre la danza en la adoración de Dios. El primer problema es que Dios nunca nos manda en el Nuevo Testamento de bailar como una parte de la adoración. Tal vez Ud. piensa que no significa nada, porque tenemos libertad de hacer lo que queremos en la adoración. Y, así es la creencia de la Iglesia de Roma, y por eso, tienen muchos símbolos, e inciensos, y ritos de varias clases, y sacerdotes, y cardinales, y papas, y muchas otras cosas que no nos mandó Dios. Pero, creemos que solamente debemos hacer lo que Dios nos manda en su palabra (véase abajo).
En el Antiguo Testamento había varias cosas que Dios nos mandó hacer, por ejemplo, los sacrificios de animales y los vestimentos y cosas así, que ya fueron cumplidos en el Nuevo Testamento con la venida de Cristo Jesús. Y, hay unas referencias a danza en el Antiguo Testamento, o a lo menos, referencias posibles. En Salmo 149:3, nos dice “Alaben su nombre con danza.” Pero, la palabra para danza puede significar varias cosas. Por eso, la antigua traducción nos dice “Alaben su nombre con corro.” También nos dice en Salmo 150:4, “Alabadle con pandero y danza.” Pero, también nos dice en la Antigua, “Alabadle con adufe y flauta.” Pero, estas son las únicas referencias que indica que debemos alabar a Dios con la danza. Y, aunque sea la verdad, hay maneras en que debemos alabar a Dios que son apropiadas en nuestra vida informal, cuando no sean lícitas en la adoración en la iglesia.
Y hermano, si tiene otras preguntas, o si podemos servirle, pues, como siempre, estoy a sus pies en Cristo Jesús, y espero que nuestro Dios de gracia y amor le bendiga en todo.
Muy atte.
Su hermano en Cristo,
Esteban Larsón Macías, de www.iglesiareformada.com
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