Explíqueme por favor el versículo 1 corintios 7:14
Nos dice en 1 Corintios 7:14, “Porque el marido incrédulo es santificado en la mujer, y la mujer incrédula en el marido; pues de otra manera vuestros hijos serían inmundos, mientras que ahora son santos.” Cuando dice que el marido incrédulo es santificado en la mujer, y la mujer incrédula en el marido, está hablando de los efectos del evangelio en una casa donde uno de los padres es creyente. Es como nos dice en 1 Pedro 3: 1, “Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas, 2 considerando vuestra conducta casta y respetuosa.” No, no quiere decir que a pesar de su incredulidad, que van estar salvos los incrédulos, pero, está hablando del ejemplo santo de los creyentes. Es como nos dice el Señor en el libro de Romanos sobre la ventaja de ser judío, “1 ¿Qué ventaja tiene, pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión? 2 Mucho, en todas maneras. Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios. 3 ¿Pues qué, si algunos de ellos han sido incrédulos? ¿Su incredulidad habrá hecho nula la fidelidad de Dios?” (Romanos 3:1-3) Está diciendo que los judíos tenía la ventaja de la palabra de Dios, y por eso, aunque unos eran incrédulos, todavía recibieron la bendición de estar en el ambiente de la palabra de Dios. En la misma manera, los esposos incrédulos están santificados por el ejemplo de sus esposos.
La segunda parte del versículo nos dice, “pues de otra manera vuestros hijos serían inmundos, mientras que ahora son santos.” Este quiere decir que los hijos en las familias donde ni padre ni madre es creyente, los hijos están considerados de ser inmundos, es decir que son del mundo. Pero, nos dice que ahora los hijos de los creyentes (si sea padre o madre) son santos. En la Biblia, la palabra santo no quiere decir salvo, sino, aparatado del malo para el Señor. Así los hijos de los creyentes son santos en el Señor. Esta es una de las razones porque los primeros cristianos bautizaron a sus hijos. Leemos en Hechos 16:15, “Y cuando fue bautizada, y su familia” y en Hechos 16:33, “y en seguida se bautizó él con todos los suyos.” Y esto es así, porque cuando fue dado el Espíritu Santo en el Día de Pentecostés, el Apóstol San Pedro declaró que “Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.” (Hechos 2:39) Aquí el Apóstol está hablando a judíos que estaban acostumbrados a la ceremonia de circuncisión para sus hijos, y está declarando claramente que Dios todavía tiene promesas para los hijos de los creyentes, algo que está confirmado aquí en 1 Corintios 7:14, cuando nos dice que los hijos de los creyentes son santos.
Y hermana, si quiere más o si podemos servirle, pues, como siempre, estoy a sus pies en Cristo Jesús, y espero que nuestro Dios de gracia y amor le bendiga en todo.
Muy atte.
Su hermano en Cristo,
Esteban Larsón Macías, de www.iglesiareformada.com
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