Como ser Mujeres Colaboradoras Trabajando en Equipo

Al trabajar en equipo debemos tener una genuina consideración por los otros. Un anhelo de sacrificar intereses y gloria personales por el bienestar de todos.

Trabajar en equipo es mantener un clima de compañerismo y consideración por los demás. Si los jugadores de un equipo no son corteses el uno con el otro, no habrá manera de tener el equipo que se necesita, por lo tanto, debe haber un respeto mutuo, espíritu de unidad, interesarse por el bienestar de los demás y subordinar el egoísmo y el individualismo para trabajar por el bien del equipo en sí. Luego de tener claro que nuestras metas y resultados como equipo es lo primordial y debe ser nuestro fin, el equipo debe estar primero.

Luego de esta pequeña introducción queremos definir lo que es equipo

Un equipo es un grupo de personas que se organiza para realizar una actividad o trabajo.

El concepto de equipo procede del término francés equipe. Un origen etimológico aquel que en cuanto a significado, no ha sido mantenido por el actual, pues en la Edad Media curiosamente dicho termino se empleaba para definir el proceso de embarcar o de dotar a una nave de todo lo que se necesitara para emprender un viaje.

Un equipo es un grupo de seres humanos que se reúne y trabajan en conjunto para alcanzar una meta en común. Para esto, el equipo mantiene una cierta organización que le permita conseguir sus objetivos.

Para desarrollar mejor el tema veremos lo siguiente:

El término equipo se usa como un principio que podemos utilizar en el manejo de la familia/hogar, en nuestro espacio de trabajo, en nuestras relaciones, en nuestro manejo como iglesia, en el manejo de nuestros estudios, al trabajar siendo parte de un proyecto, al ser parte y miembro de alguna organización, al ser parte de un ministerio.

El ser parte de un equipo y desarrollar una labor o cumplir con una responsabilidad individual pero que se debe al equipo y es parte de lo que se espera de nosotros, no recibiremos un aplauso personal, pero nos brindará satisfacción personal el lograr nuestro objetivo y cumplir con nuestro papel y nuestra parte.

Quiero que puedas hacerte estas  preguntas:

-¿De qué equipo eres miembro?

-¿Crees o piensas que ese espíritu de equipo que debe embargarnos y según describo anteriormente, hará más fácil y más gozosa tu vida?

-Yéndonos a las Escrituras, veamos un ejemplo: ¿Piensas que había trabajo de equipo en la casa de la mujer virtuosa? ¿O triunfó sola?

Si leemos la lista de logros de esta mujer de Proverbios 31, veremos que contaba con un equipo de apoyo. No conozco ninguna mujer, por muy preparada que esté y por dedicada y entusiasta que sea, que pueda manejar sin ayuda los asuntos de su hogar, de su ministerio ni de los negocios que maneje, de la manera que lo hizo ella. La mujer de Proverbios 31 contaba con un entusiasmo, espíritu de trabajo y una gran dosis de “trabajo en equipo”. Sin ese entusiasmo y el equipo de apoyo no habría podido realizar los trabajos que llevó a cabo y su hogar no hubiera podido resplandecer.

Al examinar este ejemplo de la mujer virtuosa, no nos da a entender que había discordia en la casa. No había discusiones y no se muestra de que ella tuviera un espíritu sermonioso o que hubiera un espíritu de disconformidad. Lo que leemos es que su familia se levantaba y la llamaban bienaventurada. Además de su propia familia estaban sus empleadas. Esta mujer virtuosa se levantaba muy temprano para dar ración a sus cridas, así que asumo que ellas ya estaban listas para comenzar a trabajar. Todas las funciones estaban claras, ella sabía dirigir, ella se ocupaba de que cada persona en su hogar y en sus labores cotidianas de negocio.

Otra pregunta importante:

¿Cómo se aplica en tu caso este asunto de trabajar en equipo? ¿Como esposa, como madre, como mujer moderna, como joven profesional? ¿conoces el valor de la actitud el hablar en términos de “nosotros dos” en el caso de que seas casada o en “nosotros/nosotras” en caso de ser parte de un equipo, o de dirigir un equipo en el ministerio, en la oficina, en la universidad?

Nosotras estamos llamadas a ser y a modelar un ejercicio continuo de generosidad y modestia, lo cual es contrario a los instintos naturales de la naturaleza humana que enseñan a la individualidad y yoísmo.

La mujer que va a ser una verdadera ayuda idónea, que dirije bien y trabaja en equipo, debería en gran medida disminuir su propia individualidad y reclamos, para llegar a ser como la mujer de Proverbios 31, una mujer organizada, ordenada, buena gerente, directora, buena esposa, ama de casa, buena madre y todo esto lo lograba temiendo a Dios, refugiada en Dios y luego contaba con un buen equipo de trabajo, que ella sabía dirigir y cuidaba con esmero.

Finalmente, no perdamos de vista nuestra misión y visión en esta vida. Que el lugar donde Dios nos ha colocado podamos servir, dar, ser fieles colaboradoras, trabajemos en equipo. Sea que estemos en dirección o que estemos bajo dirección. El trabajo en equipo puede revolucionar nuestro hogar, nuestra área de trabajo, nuestro ministerio. Esforcémonos en fomentar la actitud “estamos todos juntos en esto”, confiemos en Dios, pongamos todo en sus manos, nuestras metas, objetivos, deseos, tanto individuales como grupales, oremos por nuestro equipo de apoyo y sirvámosle, preocupémonos por ellos. Cuidemos lo que Dios nos ha dado. Cuidemos las bendiciones que Dios nos ha dado y veremos la Gloria de Dios en nuestras vidas. Veremos frutos y la bendición de Dios en las vidas de los que nos rodean.

Tener tiempo de soledad, es una bendición cuando lo hacemos con propósito, Unos días de soledad para organizarnos y enfocarnos en nuestras metas y objetivos y para tener tiempo con Dios son muy importantes, pero la vida es más interesante, emocionante y más productiva, cuando otras personas están involucradas, unámonos al equipo de nuestra familia, de nuestro trabajo, en algún ministerio, un grupo de estudio y oración, colaboremos con todo nuestro corazón, sirvamos a Dios sirviendo a otros.

Es mi oración animarles con esta publicación, que Dios les ayude a canalizar adecuadamente sus emociones y sentimientos, a organizarse y seguir adelante, con fe en Dios que nos fortalece y nos da constantemente nuevas oportunidades.

Evelyn Calcaño Cepeda

Viviendoporprincipiosyfe.org


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Publicado por Evelyn Calcaño Cepeda para VIVIENDO POR PRINCIPIOS Y FE el 6/17/2017 02:49:00 p. m.
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