“me gustaría saber sobre el sello del que habla apocalipsis es literal o simbólico lo del sello de la bestia.”

Pues, no estoy seguro si entiendo bien su pregunta, pero, voy a intentar de contestarle según lo poco de mi habilidad. Cuando leo el libro de Apocalipsis, los únicos que tienen el sello son los están sellados a Dios. Leemos en Apocalipsis 7:3-5, “diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios. Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel. De la tribu de Judá, doce mil sellados. De la tribu de Rubén, doce mil sellados. De la tribu de Gad, doce mil sellados.” Y también leemos en Apocalipsis 9:4, “Y se les mandó que no dañasen a la hierba de la tierra, ni a cosa verde alguna, ni a ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tuviesen el sello de Dios en sus frentes.”

Pero, supongo que Ud. no refiere al sello, sino la marca de la bestia, de que habla Apocalipsis 13:16-17, “Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre.”
(Y véase también Apocalipsis 14:9, 11; 16:2; 19:20; 20:4)

Y tal vez Ud. crea que estoy malusando su tiempo en marcar la diferencia entre “sello” y “marca”, pero, es importante notar tanto las cosas semejantes y así también las diferencias. Los dos indican a quién pertenecemos, es decir, al Señor o al enemigo. Y los dos están utilizados en maneras semejantes, y por eso, creo que si fueran visibles, sería así con el sello y así con la marca. Una diferencia entre los dos es que la marca es negativa, y el sello positivo, como dice San Pedro en el Día de Pentecostés, que la promesa es para nosotros y para nuestros hijos (Hechos 2).

Pero, supongo que Ud. ha leído el libro de Apocalipsis y ya sabe que fue dirigido principalmente a las siete iglesias de Asia. Por supuesto, hay cosas como la segunda venida triunfal y el fin de todas las cosas que todavía no llegaron, y aplican a nosotros. Pero, creo que la gran parte del libro fue escrito principalmente a ellos (según la palabra del Señor), y no tenemos ningún record histórica que los de las siete iglesias recibieron un sello, o que los del enemigo en su tiempo tenían la marca de él. Los santos de las siete iglesias de Asia que vivieron en los postreros días como nosotros pasaron por muchas de las grandes tribulaciones que pronosticó San Juan sobre ellos, pero, de un sello de Cristo Jesús, o una marca del enemigo, no sabemos nada en sentido literal. Por eso, creo que es espiritual.

A la misma vez, ¡no soy Dios! Y si un día alguien surge y dice que tenemos que estar marcado, con el sello de Cristo o con marca del enemigo, pues, ¡es el sello de Cristo para mí!

Y hermana, si quiere algo más, estoy a sus pies en Cristo Jesús, y espero que Dios le bendiga en todo.

Muy atte.

Su hermano en Cristo,

Esteban Larsón Macías, de www.iglesiareformada.com
Misionero a Uruguay de la Iglesia Presbiteriana Ortodoxa,
Rivera, Uruguay
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